Todavía hoy vemos atónitas como algunas empresas publicitarias tiran de modelos que perpetúan los roles tradicionalmente asignados a cada género, reproduciendo estereotipos machistas con las que muchas personas ya no nos sentimos identificadas.
Algunos de estos estereotipos consisten en mostrar a las mujeres como seres incapaces de dominar sus emociones o de conducir un coche. Estas representaciones, además de exponer modelos absolutamente alejados de la realidad, promueven la inferioridad o ridiculización de las mujeres.
En este caso, la sección de micromachismos del diario.es nos muestra un par de anuncios que nos recuerdan que otra publicidad es necesaria. Ver enlace